jueves, 21 de noviembre de 2013

A veces


A veces, pero solo a veces, no soy tan valiente y temerario como aparento, a veces y solo a veces necesito de abrazos, de que me digan cosas dulces y que me traten como a un niño, a veces no soy tan inteligente como aparento, a veces y solo a veces me gusta perderme en los imaginarios estúpidos de los cuales soy artífice, me rio solo; me rio como loco dejándome llevar por ellos, encuentro poéticas algunas miradas y claro desconozco lo bien estructurado de la realidad, a veces también me gusta  comer helados y olvidarme que ya no soy tan joven, en ocasiones añoro la tibieza de los cuerpos amados y la humedad de los labios besados en  una noche de lluvia.  De vez en cuando, cuando los días son largos y las noches cortas me hago frágil como una sombra y mientras recorro las calles oscuras pegado a mis recuerdos anhelo la luna llena para hacerme más claro frente a ellos; quiero saberme  más hombre y menos sueño, hay días, como el de hoy, en los que me dejo llevar tan solo para comprobar  que tengo un corazón que late y un cuerpo que vibra con sus latidos, pero claro esto solo pasa a veces, las veces en las que me deshago en anhelos y la música se hace la mejor aliada mientras viajo en el bus que me llevara a casa, las veces que me pregunto qué hubiera pasado, para responderme preguntándome que pasará